viernes, 6 de marzo de 2015

Origen y evolución de la cerveza en España (XI) y fin de esta parte.





Siglo XXI

Nace el Grupo Mahou-San Miguel

Llegamos a 2000, otro año clave en la historia de la cerveza en España. Es el año en que se crea otro de los grandes grupos españoles. Mahou compra el 70% de San Miguel Fábrica de Cerveza y Malta, que poseía Danone, por 55.000.000.000 pesetas (330 millones y medio de euros). El otro 30% ya era propiedad de la madrileña. Tras la adquisición se crea el Grupo Mahou-San Miguel. Es la respuesta a la reciente fusión de Cruzcampo-Águila bajo la dirección de Heineken. Pero la compra, al igual que sucedió en la formación de Heineken España, se autorizará con ciertas condiciones. En principio el Tribunal de Defensa de la Competencia emitirá un dictamen contrario a la operación. Pero según la legislación, la última palabra la tendrá el Servicio de la Competencia del Ministerio de Economía. Hay que tener en cuenta que tras la compra, el grupo tendría el 33% de la producción, que representa un 30% del consumo en España 1. Finalmente la operación será aprobada por el Consejo de Ministros con la condición de que en un plazo de tres meses, el grupo creado como consecuencia de la fusión, se desprenda de su participación en Damm S.A. 2 .


El recién creado grupo adoptará una estrategia de adquisiciones que llevará en 2004 a la compra de Cervezas Anaga, que luego cambiaría su denominación a Reina Fábrica de Cervezas. Mahou-San Miguel se compromete a invertir seis millones de euros en la fábrica 3.

Reaparición de Moritz. Ejemplo de recuperación de marcas.

Otro hecho relevante, más por su carácter romántico que por su impacto en el sector, es el regreso de la antigua marca barcelonesa Moritz. Todo un referente en la Ciudad Condal, llegó a ser la marca más vendida en Cataluña. El proyecto es impulsado por los Roehrick, tataranietos de Louis Moritz, el fundador. La familia adquirió los derechos de la marca cuando ésta tuvo que ir a subasta de liquidación en 1978. Los Roehrick apostarán por un producto selecto y circunscrito a Cataluña fundamentalmente. Se promocionará anunciando la utilización lúpulo checo de la mejor calidad y de agua del Montseny, aunque la cerveza se producirá en la fábrica de La Zaragozana (en Zaragoza!!), de la que los herederos de Moritz tienen el control. Más adelante elaborarán también la recuperada marca Epidor 4. En realidad Moritz no es una empresa cervecera resucitada, es una marca comercial de La Zaragozana. Pero toda la imagen de marca incluido el edificio de la antigua fábrica, hoy tienda y restaurante, sugieren el renacimieno de la empresa como tal más que el de una marca mítica producida por una empresa "forastera". El modelo es el mismo que se ha utilizado para colocar en el mercado marcas que recuerdan a etiquetas icónicas en determinadas zonas, como por ejemplo sucedió con “Turia” por parte de Damm. La idea no es nueva, recordemos la aparición de Estrella del Sur con su fuerte asociación a Sevilla y Andalucía en general, Victoria, "Malagueña y exquisita", pero fabricada en Murcia por la empresa catalana y muchos otros ejemplos.





Los inversores extranjeros se retiran. Permanecen los “gigantes”.

En 2005, Fábrica de Cervezas La Alhambra cambia su denominación por Cervezas Alhambra y crea Andaluza de Cervezas y Bebidas, para la fabricación y venta de cerveza, y el Grupo Alhambra Alimentaria en el que se integra. Al año siguiente el grupo al completo será adquirido por Mahou-San Miguel. La operación es aprobada en 2007 en el Consejo de Ministros previo informe favorable del Tribunal de la Defensa de la Competencia. El desembolso será de 200 millones de euros y se mantiene la marca adquirida 5.

En el mismo año, Danone que poseía  un tercio de las acciones de Mahou, a través de su filial S.A. Générale Agro-alimentaire de Participations, desinvierte su participación. Los grupos Familia Herráiz y Familia Gervás, que poseían otro tercio cada una, adquirirán las acciones pasando a controlar cada uno el 50% de la empresa 6.

Han pasado muchos años en nuestro repaso cervecero sin hablar de Damm. Recordemos que el Ministerio de Economía impuso a Mahou y San Miguel desperenderse de su participación en la cervecera catalana, al fusionarse en 2002. Las acciones fueron adquiridas por Interbrew por 84 millones de euros. Transcurridos tres años, Interbrew, ahora InBev, se desprende de su paquete accionarial por 176 millones de euros. Parte proveniente del precio de venta de las acciones, adquiridas por los actuales accionistas de Damm, y parte proveniente de los beneficios de 2006 7.

Los grandes grupos

Visto el origen y la posterior evolución de la fabricación de cerveza en España sólo queda plasmar el panorama actual (2015) refiriendo cómo han quedado agrupadas las empresas cerveceras de gran producción en tan sólo siete grupos cerveceros de los que tres son “gigantes internacionales”:

















Empresas españolas de los grandes grupos cerveceros registradas en el RGSAA.
 

Nacen las “artesanas”.

Estos últimos años se caracterizan por dos hechos aparentemente opuestos. Por un lado las “gigantes” internacionales se reparten el mercado de la cerveza en el mundo, de forma que los grupos nacionales acaban formando parte de esta red mundial. La consecuencia es que aparecen en el mercado local una gran variedad de marcas extranjeras distribuidas por los canales ya establecidos para las locales. Se materializa un mercado global. Por otro lado, asistimos al nacimiento de pequeñas fábricas, que se autodenominan artesanas, de pequeña producción y con una distribución mayoritariamente local. El método de producción, comparado con el de las grandes compañías, puede en efecto considerarse artesano. Sin embargo, para la mayoría sería más correcto utilizar la traducción del término inglés “microbrewery”, es decir microcervecería, que reproduce todo el proceso industrial pero a pequeña escala. El fenómeno, en España, no es nuevo, pero en estos últimos años es cuando hemos asistido a una expansión de este tipo de cerveceras. Han crecido en número, en calidad, en variedad de estilos y en estabilidad de marcas, aunque todavía queda un gran recorrido.




La aparente contradicción en el desarrollo de ambas corrientes, desarrollo de un gran mercado global y de muchos pequeños mercados locales, se resuelve si entendemos que detrás de ambos está la creciente demanda por un producto diferente al tradicional. Hace años era impensable que un consumidor sevillano, por ejemplo, bebiese una marca que no fuera Cruzcampo, uno catalán, Estrella o San Miguel y uno castellano, Mahou o Águila. Este localismo se enfatizaba por la dificultad de otras marcas en situarse en el mercado “propio” de una competidora. El informe del Servicio de Defensa de la Competencia de 2005, referente a la adquisicón de Herráiz y Gervás de las acciones de Mahou, alude a esta dificultad de posicionarse en ciertos mercados locales. Aparte de este “nacionalismo cervecero”, la cerveza se identificaba con una bebida refrescante con alcohol, no se apreciaba lo que se apartara del estilo conocido, la “rubia fresquita”. Pocos ejemplos en contra podemos hallar, alguna cerveza “negra” y alguna “tostada”, para paladares más rebeldes, fueron las únicas variedades que sobrevivieron.

La concentración de marcas y los acuerdos de distribución, propiciaron una política de distribución más amplia, sobre todo a través de grandes comercios, aunque no se ha perdido del todo la identificación local con una marca determinada. Prueba de ello es que se recuperan marcas tradicionales promocionadas en base a su identificación localista. Pero poco a poco, el consumidor más inquieto, pudo probar estilos diferentes, stout, porter, munich, abadía, etc.

Sigue siendo difícil, especialmente en algunas zonas, encontrar en bares y restaurantes marcas ajenas a la dominante en la zona, pero alguna compañía empieza a negociar sus propias franquicias de puntos finales de venta en “zonas del competidor”. Todo ello ha contribuido a crear una mayor cultura cervecera. De este interés por la variedad y calidad nació la cervecería casera. El paso siguiente, la microcervecería, era algo lógico. Muchos intentos fallidos han llevado a este sector a irse depurando. Se ha hecho más profesional y el crecimiento es imparable hasta que alcance su cuota estable. Mi opinión es que en este sector se “abusa” de la utilización de ingredientes “exóticos”. Sólo con agua, malta de cebada, lúpulo y levadura se pueden conseguir más de cincuenta variedades de cerveza. Pero por supuesto que está bien ser creativo, si no lo son los artesanos ¿quién lo va a ser?

En 2011 había registradas unas setenta empresas cerveceras aparte de las de gran producción 8, me refiero a las que son propiedad de los grandes grupos, Mahou-San Miguel, Hijos de Rivera, Guinness (Unión Cervecera), SABMiller (CCC), La Zaragozana y Heineken. Girona acogía en ese año 13 de ellas y Valencia 9, el resto se distribuye por todo el territorio nacional. Muchas de estas microfábricas producen sin filtrar ni pasteurizar, entonces podemos hablar propiamente de cervezas artesanas. Realmente no emulan el proceso industrial a pequeña escala, más bien emulan el proceso casero a mayor escala. Algunas se distribuyen incluso en grandes comercios, otras se venden en el propio establecimiento siendo éste fábrica-bar, lo que en el mundo anglosajón es un “brewpub” o en el germánico una “brauhaus”.



La mayoría de estas cervezas se vende en el circuito de la hostelería próxima a la fábrica o en el caso de mayores producciones en establecimientos concertados, es decir mediante canales de distribución propios y por supuesto a través de “tiendas virtuales” por internet. Algunas pueden encontrarse regularmente ya en grandes comercios de implantación en todo el estado.

Una de las más antiguas, si no la más antigua que perdura, es Euskal Garagardoa, microcervecera del País Vasco, establecida en 1998, produce la marca Pagoa en tres variedades,  Orhi, pilsener; Gorri, estilo red ale; y Zunbeltz, stout. En Cataluña, Llupol i Llevats y Cervesera del Montseny, están establecidas desde principio de siglo, fabrican varias marcas que representan una gran variedad de estilos. En Toledo Domus y Sagra se han consolidado como potentes marcas distribuidas a escala nacional. En Madrid Cibeles y Carmen en Tarragona. En fin, no sé si es buena idea ir nombrando marcas, ya que la inevitable omisión de algunas (muchas) puede ser justificado motivo de protesta, sólo añadiré que en todas las autonomías, excepto en la ciudad autónoma de Melilla, existen empresas microcerveceras. Solamente he querido presentar un panorama actual del sector. Según Birrapedia en 2015 existen 501 microcervecerías en España 9. Pero lo cierto es que en el Registro de Empresas Alimentarias, bajo la clave “bebidas alcohólicas” y categoría “fabricación, elaboración o transformación”, dentro de la actividad “cerveza” a día de hoy (6 de marzo de 2015) sólo existen registradas 358 empresas, de las cuales 18 pertenecen a los grandes grupos cerveceros. Por tanto hay 340 “microcervecerías” 10 que comparadas con las 70 de 2011 nos da una idea del crecimiento que está manteniendo el sector.




Fábricas de los grupos cerveceros que producen en España



Bibliografía

Xavier García Barber. La cerveza en España. Lid Editorial, 2014.

Fernando Martínez Laínez. La cerveza en España. Cerveceros de España, ed. 1996.

Referencias

1. El País. 4 de noviembre de 2000.

2. ABC. 4-11-2000. pág. 49.

3. ABC 6-5-2004. pág. 94.

4. El Periódico. Barcelona.  19-02-2012.

5. El Mundo. 2-11-2006 y El Mundo. 23-03-2007.
   
    Informe del Tribunal de Defensa de la Competencia. Expediente de Concentración Económica C103/07 Mahou San Miguel/Alhambra.

6. Informe Servicio de Defensa de la Competencia. N-05060 Herráiz/Gervás/Mahou.
7. El País. 6 de agosto de 2005.

8. Informe Socioeconómico del Sector de la Cerveza 2011. En: Cerveza y Malta XLIX (2). nº 194. Año 2012.

            consultado 5 de marzo de 2015.
            Curiosamente, la misma consulta el  6 de marzo de 2015 arroja el resultado de 503.
 
10. Registro General Sanitario de Empresas Alimentarias y Notificación de Alimentos (RGSAA). Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN)
 


Imágenes


Brauhaus Spandau: Miguel Juanco. Licencia Creative Commons non Commercial Use.

Fábricas españolas de los grandes grupos cerveceros. Miguel Juanco. Licencia Creative Commons non Commercial Use.